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    "Arancelillo común", se comenta que es una especie invasora. X

    Last update: Se le ha perdido la pista, pero volverá en 90 dias
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  • MÉXICO: TIERRA QUE NACE DEL FUEGO Y LA FLOR

    México es más que una nación:
    es una voz antigua que canta en náhuatl,
    una danza entre el mar y la montaña,
    una raíz que florece en mil colores.

    En su pecho caben volcanes dormidos,
    selvas que respiran siglos,
    ciudades que despiertan con rezos y guitarras,
    y un pueblo que, aun herido, nunca se arrodilla.

    Los 32 Corazones de una Patria Viva

    Cada estado es un latido distinto,
    una historia que se teje con manos humildes,
    con sazón, con orgullo, con fuerza y belleza:

    1. Aguascalientes, cuna de la Feria de San Marcos y tierra de vino y guayaba, donde la tradición taurina y la devoción se entrelazan

    2. Baja California, con sus valles de vino y el manto azul del Pacífico, donde la tierra se funde con la modernidad y la cocina de frontera.

    3. Baja California Sur, santuario de ballenas y desiertos mágicos, donde Los Cabos y La Paz son susurrados por la brisa marina.

    4. Campeche, amurallado y sereno, donde las calles empedradas guardan piratas, mayas y atardeceres de oro.

    5. Chiapas, rebelde y mística, donde los tzotziles y lacandones aún hablan con los árboles, y Palenque canta al pasado.

    6. Chihuahua, el gigante del norte, donde la Sierra Tarahumara abriga a los rarámuris y el cobre brilla entre barrancas profundas.

    7. Ciudad de México, corazón palpitante, mezcla de lo antiguo y lo moderno, donde Tenochtitlán respira bajo el concreto y la cultura rebosa en cada esquina.

    8. Coahuila, vasto y fuerte, de viñedos, desiertos y dinosaurios, donde Parras guarda el vino más antiguo del continente.

    9. Colima, pequeño en tamaño, inmenso en alma: con su volcán activo, sus playas tranquilas y su café de altura.

    10. Durango, tierra del cine y del silencio dorado del desierto, donde nacieron forajidos, leyendas y paisajes de película.

    11. Estado de México, diverso como el país entero, con Teotihuacán alzándose hacia el cielo, y pueblos con alma de cantera y maíz.

    12. Guanajuato, barroco y valeroso, donde Hidalgo encendió la llama de la libertad y la arquitectura pinta poesía sobre piedra.

    13. Guerrero, de playas rebeldes y montañas guerrilleras, donde Acapulco brilla, pero también lo hacen sus pueblos afromexicanos.

    14. Hidalgo, tierra otomí y tolteca, de prismas basálticos, pastes y ferias que honran la tradición minera.

    15. Jalisco, cuna del mariachi, el tequila y la charrería, donde Guadalajara canta, el lago de Chapala abraza y el alma mexicana se afirma.

    16. Michoacán, patria del alma purépecha, de mariposas monarca, guitarras de Paracho y la Noche de Muertos más viva del mundo.

    17. Morelos, jardín de la eterna primavera, de balnearios y zapatismo, donde la historia florece entre aguas termales.

    18. Nayarit, escondido y azul, entre la sierra y el mar, con playas como Sayulita y una herencia huichol que danza con el viento.

    19. Nuevo León, industrial y vigoroso, donde Monterrey alza su orgullo al pie del Cerro de la Silla y las carnes asadas son religión.

    20. Oaxaca, un universo en sí mismo: 16 pueblos originarios, siete moles, y una sabiduría milenaria que vibra en mercados y montañas.

    21. Puebla, barroca y heroica, con sus volcanes eternos, su mole legendario y su Talavera que embellece el mundo.

    22. Querétaro, limpio y valiente, donde los acueductos custodian la historia y la independencia susurra entre plazas coloniales.

    23. Quintana Roo, tierra de dioses mayas y mares turquesa, donde Tulum y Bacalar encandilan, y los cenotes son espejos del alma.

    24. San Luis Potosí, de huasteca y desierto, donde la música, las cascadas y las minas de Real de Catorce encantan al viajero.

    25. Sinaloa, rítmico y fértil, de banda, mariscos y valles verdes que alimentan a México entero.

    26. Sonora, donde el sol forja carácter y las carnes se asan con paciencia; tierra yaqui y de valles que huelen a mezquite.

    27. Tabasco, edén húmedo y sabroso, cuna del cacao y la cultura olmeca, donde el agua lo es todo.

    28. Tamaulipas, de frontera vibrante y playas amplias, donde la tradición norteña cabalga al compás del acordeón.

    29. Tlaxcala, pequeño y esencial, donde nació la alianza indígena que transformó el destino de un imperio.

    30. Veracruz, jarocho y sonoro, puerto de alegría, de huapango, fandango y café, donde el mar abraza la montaña.

    31. Yucatán, donde el maya no ha muerto, donde los cenotes guardan secretos de agua viva, y Mérida brilla con sabor, paz y orgullo.

    32. Zacatecas, de cantera y plata, donde la historia duerme en callejones empedrados, y la poesía se canta con tambora.

    México no se recorre, se siente.
    No se explica, se vive.
    No se olvida, porque en cada rincón hay un altar, una canción, una lucha y una esperanza.
    Es un país que sangra con dignidad y florece con amor.
    MÉXICO: TIERRA QUE NACE DEL FUEGO Y LA FLOR México es más que una nación: es una voz antigua que canta en náhuatl, una danza entre el mar y la montaña, una raíz que florece en mil colores. En su pecho caben volcanes dormidos, selvas que respiran siglos, ciudades que despiertan con rezos y guitarras, y un pueblo que, aun herido, nunca se arrodilla. Los 32 Corazones de una Patria Viva Cada estado es un latido distinto, una historia que se teje con manos humildes, con sazón, con orgullo, con fuerza y belleza: 1. Aguascalientes, cuna de la Feria de San Marcos y tierra de vino y guayaba, donde la tradición taurina y la devoción se entrelazan 2. Baja California, con sus valles de vino y el manto azul del Pacífico, donde la tierra se funde con la modernidad y la cocina de frontera. 3. Baja California Sur, santuario de ballenas y desiertos mágicos, donde Los Cabos y La Paz son susurrados por la brisa marina. 4. Campeche, amurallado y sereno, donde las calles empedradas guardan piratas, mayas y atardeceres de oro. 5. Chiapas, rebelde y mística, donde los tzotziles y lacandones aún hablan con los árboles, y Palenque canta al pasado. 6. Chihuahua, el gigante del norte, donde la Sierra Tarahumara abriga a los rarámuris y el cobre brilla entre barrancas profundas. 7. Ciudad de México, corazón palpitante, mezcla de lo antiguo y lo moderno, donde Tenochtitlán respira bajo el concreto y la cultura rebosa en cada esquina. 8. Coahuila, vasto y fuerte, de viñedos, desiertos y dinosaurios, donde Parras guarda el vino más antiguo del continente. 9. Colima, pequeño en tamaño, inmenso en alma: con su volcán activo, sus playas tranquilas y su café de altura. 10. Durango, tierra del cine y del silencio dorado del desierto, donde nacieron forajidos, leyendas y paisajes de película. 11. Estado de México, diverso como el país entero, con Teotihuacán alzándose hacia el cielo, y pueblos con alma de cantera y maíz. 12. Guanajuato, barroco y valeroso, donde Hidalgo encendió la llama de la libertad y la arquitectura pinta poesía sobre piedra. 13. Guerrero, de playas rebeldes y montañas guerrilleras, donde Acapulco brilla, pero también lo hacen sus pueblos afromexicanos. 14. Hidalgo, tierra otomí y tolteca, de prismas basálticos, pastes y ferias que honran la tradición minera. 15. Jalisco, cuna del mariachi, el tequila y la charrería, donde Guadalajara canta, el lago de Chapala abraza y el alma mexicana se afirma. 16. Michoacán, patria del alma purépecha, de mariposas monarca, guitarras de Paracho y la Noche de Muertos más viva del mundo. 17. Morelos, jardín de la eterna primavera, de balnearios y zapatismo, donde la historia florece entre aguas termales. 18. Nayarit, escondido y azul, entre la sierra y el mar, con playas como Sayulita y una herencia huichol que danza con el viento. 19. Nuevo León, industrial y vigoroso, donde Monterrey alza su orgullo al pie del Cerro de la Silla y las carnes asadas son religión. 20. Oaxaca, un universo en sí mismo: 16 pueblos originarios, siete moles, y una sabiduría milenaria que vibra en mercados y montañas. 21. Puebla, barroca y heroica, con sus volcanes eternos, su mole legendario y su Talavera que embellece el mundo. 22. Querétaro, limpio y valiente, donde los acueductos custodian la historia y la independencia susurra entre plazas coloniales. 23. Quintana Roo, tierra de dioses mayas y mares turquesa, donde Tulum y Bacalar encandilan, y los cenotes son espejos del alma. 24. San Luis Potosí, de huasteca y desierto, donde la música, las cascadas y las minas de Real de Catorce encantan al viajero. 25. Sinaloa, rítmico y fértil, de banda, mariscos y valles verdes que alimentan a México entero. 26. Sonora, donde el sol forja carácter y las carnes se asan con paciencia; tierra yaqui y de valles que huelen a mezquite. 27. Tabasco, edén húmedo y sabroso, cuna del cacao y la cultura olmeca, donde el agua lo es todo. 28. Tamaulipas, de frontera vibrante y playas amplias, donde la tradición norteña cabalga al compás del acordeón. 29. Tlaxcala, pequeño y esencial, donde nació la alianza indígena que transformó el destino de un imperio. 30. Veracruz, jarocho y sonoro, puerto de alegría, de huapango, fandango y café, donde el mar abraza la montaña. 31. Yucatán, donde el maya no ha muerto, donde los cenotes guardan secretos de agua viva, y Mérida brilla con sabor, paz y orgullo. 32. Zacatecas, de cantera y plata, donde la historia duerme en callejones empedrados, y la poesía se canta con tambora. México no se recorre, se siente. No se explica, se vive. No se olvida, porque en cada rincón hay un altar, una canción, una lucha y una esperanza. Es un país que sangra con dignidad y florece con amor.
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  • Quédate con la que traiga cervezas, porque problemas traen todas
    Quédate con la que traiga cervezas, porque problemas traen todas 🍻🍺
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  • Los Mexicas: El Gran Imperio del Valle de México

    El sol se alzaba como un disco de oro sobre el Valle de México, bañando de luz las aguas del lago Texcoco y las chinampas que flotaban como retazos de tierra viva. Era el siglo XIV, y el viento silbaba entre los juncos, trayendo el aroma del copal y el murmullo de una ciudad en ascenso. El crujir de las sandalias resonaba en las calzadas de Tenochtitlán, mientras el eco de los tambores retumbaba desde el Templo Mayor, anunciando el poder de los mexicas. Este pueblo, conocido también como aztecas, transformó un pantano en el corazón de un imperio que dominó Mesoamérica, un torbellino de guerra, fe y genio que dejó su huella en la historia. Este relato te llevará al alma de los mexicas, un viaje donde su grandeza se alzó desde las raíces de un mito hasta las cenizas de la conquista.

    El Nacimiento de un Destino
    La niebla envolvía el lago al amanecer, y las sombras de las garzas planeaban sobre las aguas cuando los mexicas, guiados por Huitzilopochtli, llegaron al Valle en 1325. El aroma del lodo y las plumas húmedas impregnaba el aire mientras este pueblo chichimeca, tras salir de Aztlán, encontró su signo profetizado: un águila devorando una serpiente sobre un nopal. El crujir de las ramas al construir sus primeros altares marcaba el inicio de Tenochtitlán, una ciudad sobre pilotes en un islote pantanoso. El tintineo de las herramientas al cavar canales resonaba como un desafío a la naturaleza, un eco de su voluntad de forjar un hogar.

    Bajo Acamapichtli, su primer tlatoani, los mexicas pasaron de ser un pueblo errante a vasallos de Azcapotzalco. El silbido de las promesas de poder resonó en 1428, cuando Itzcoatl, con la Triple Alianza —Tenochtitlán, Texcoco y Tlacopan—, aplastó a los tepanecas. El crujir de las llamas al consumir la ciudad enemiga marcó el nacimiento del imperio, un susurro de su ascenso que pronto resonaría desde el Golfo hasta el Pacífico.

    El Imperio de Sangre y Gloria
    El sol ardía en lo alto del siglo XV, y las tierras temblaban con el rugido de las conquistas mexicas. El aroma del sudor y la pólvora aún estaba lejos, pero el crujir de las macanas al chocar resonaba en campañas contra los tlaxcaltecas, zapotecas y mixtecos. El silbido de las flechas cortaba el aire en las xochiyaoyotl, guerras floridas para capturar prisioneros, mientras el tintineo de los escudos al apilarse marcaba su dominio. Bajo Moctezuma Ilhuicamina y Ahuizotl, el imperio creció hasta abarcar 200,000 kilómetros cuadrados, el eco de sus tributos —plumas, jade, cacao— resonando en los mercados de Tlatelolco.

    Tenochtitlán, con sus 200,000 habitantes, era una maravilla: canales navegables, calzadas y el Templo Mayor, donde el crujir de los cuchillos de obsidiana abría pechos para Huitzilopochtli. El silbido de los sacerdotes al entonar himnos aseguraba el amanecer, un susurro de una fe que unía guerra y cosmos. En 2025, excavaciones bajo la Ciudad de México revelaron un tzompantli con miles de cráneos, un eco de su devoción sangrienta.

    La Vida en el Corazón del Imperio
    El crepúsculo teñía el lago de rojo, y el aroma del maíz y las flores llenaba las plazas mientras los mexicas prosperaban. El crujir de las chinampas al cosecharse resonaba en su agricultura flotante, un genio que alimentaba a miles. El silbido de las flautas en las fiestas del calendario tonalámatl —18 meses de 20 días— marcaba su vida, y el tintineo de las plumas al coserse en trajes de guerreros águila y jaguar resonaba como un símbolo de honor. Escuelas como la calmecac y la telpochcalli forjaban a nobles y plebeyos, el eco de sus lecciones resonando en un pueblo jerárquico pero unido.

    El comercio florecía en Tlatelolco, el crujir de las barcas al descargar cacao y turquesa llenando el aire. El silbido de los poetas, como Nezahualcóyotl de Texcoco, cantaba a la fugacidad de la vida, un susurro de una cultura que equilibraba la guerra con el arte. En 2024, un códice hallado en Chalco narró la fundación de Tenochtitlán, un eco de su orgullo grabado en papel de amate.

    La Caída y el Eco
    El siglo XVI trajo el estruendo de 1519, y el aroma del hierro y la pólvora llenó el aire cuando Hernán Cortés llegó con sus barcos. El crujir de las velas al desplegarse resonó mientras Moctezuma Xocoyotzin lo recibió, confundido por profecías de Quetzalcóatl. El silbido de las traiciones marcó la Noche Triste en 1520, y el tintineo de las armas al chocar resonó en la caída de Tenochtitlán en 1521, bajo Cuauhtémoc. El eco de las ruinas al derrumbarse sepultó un imperio, pero no su espíritu.

    Los españoles impusieron su cruz, el crujir de las iglesias alzándose sobre los templos, pero las raíces mexicas sobrevivieron en la sangre mestiza y las tradiciones. El silbido de las lenguas náhuatl aún resuena en pueblos como Milpa Alta, un susurro de su resistencia. A 9 de abril de 2025, los mexicas son un torbellino vivo: en el Zócalo que cubre su capital, en los códices que narran su grandeza, y en el alma de un México que lleva su legado. No fue solo un imperio; fue un rugido de poder y fe, un eco que invita a mirar más allá del lago, al corazón de una civilización eterna.
    Los Mexicas: El Gran Imperio del Valle de México El sol se alzaba como un disco de oro sobre el Valle de México, bañando de luz las aguas del lago Texcoco y las chinampas que flotaban como retazos de tierra viva. Era el siglo XIV, y el viento silbaba entre los juncos, trayendo el aroma del copal y el murmullo de una ciudad en ascenso. El crujir de las sandalias resonaba en las calzadas de Tenochtitlán, mientras el eco de los tambores retumbaba desde el Templo Mayor, anunciando el poder de los mexicas. Este pueblo, conocido también como aztecas, transformó un pantano en el corazón de un imperio que dominó Mesoamérica, un torbellino de guerra, fe y genio que dejó su huella en la historia. Este relato te llevará al alma de los mexicas, un viaje donde su grandeza se alzó desde las raíces de un mito hasta las cenizas de la conquista. El Nacimiento de un Destino La niebla envolvía el lago al amanecer, y las sombras de las garzas planeaban sobre las aguas cuando los mexicas, guiados por Huitzilopochtli, llegaron al Valle en 1325. El aroma del lodo y las plumas húmedas impregnaba el aire mientras este pueblo chichimeca, tras salir de Aztlán, encontró su signo profetizado: un águila devorando una serpiente sobre un nopal. El crujir de las ramas al construir sus primeros altares marcaba el inicio de Tenochtitlán, una ciudad sobre pilotes en un islote pantanoso. El tintineo de las herramientas al cavar canales resonaba como un desafío a la naturaleza, un eco de su voluntad de forjar un hogar. Bajo Acamapichtli, su primer tlatoani, los mexicas pasaron de ser un pueblo errante a vasallos de Azcapotzalco. El silbido de las promesas de poder resonó en 1428, cuando Itzcoatl, con la Triple Alianza —Tenochtitlán, Texcoco y Tlacopan—, aplastó a los tepanecas. El crujir de las llamas al consumir la ciudad enemiga marcó el nacimiento del imperio, un susurro de su ascenso que pronto resonaría desde el Golfo hasta el Pacífico. El Imperio de Sangre y Gloria El sol ardía en lo alto del siglo XV, y las tierras temblaban con el rugido de las conquistas mexicas. El aroma del sudor y la pólvora aún estaba lejos, pero el crujir de las macanas al chocar resonaba en campañas contra los tlaxcaltecas, zapotecas y mixtecos. El silbido de las flechas cortaba el aire en las xochiyaoyotl, guerras floridas para capturar prisioneros, mientras el tintineo de los escudos al apilarse marcaba su dominio. Bajo Moctezuma Ilhuicamina y Ahuizotl, el imperio creció hasta abarcar 200,000 kilómetros cuadrados, el eco de sus tributos —plumas, jade, cacao— resonando en los mercados de Tlatelolco. Tenochtitlán, con sus 200,000 habitantes, era una maravilla: canales navegables, calzadas y el Templo Mayor, donde el crujir de los cuchillos de obsidiana abría pechos para Huitzilopochtli. El silbido de los sacerdotes al entonar himnos aseguraba el amanecer, un susurro de una fe que unía guerra y cosmos. En 2025, excavaciones bajo la Ciudad de México revelaron un tzompantli con miles de cráneos, un eco de su devoción sangrienta. La Vida en el Corazón del Imperio El crepúsculo teñía el lago de rojo, y el aroma del maíz y las flores llenaba las plazas mientras los mexicas prosperaban. El crujir de las chinampas al cosecharse resonaba en su agricultura flotante, un genio que alimentaba a miles. El silbido de las flautas en las fiestas del calendario tonalámatl —18 meses de 20 días— marcaba su vida, y el tintineo de las plumas al coserse en trajes de guerreros águila y jaguar resonaba como un símbolo de honor. Escuelas como la calmecac y la telpochcalli forjaban a nobles y plebeyos, el eco de sus lecciones resonando en un pueblo jerárquico pero unido. El comercio florecía en Tlatelolco, el crujir de las barcas al descargar cacao y turquesa llenando el aire. El silbido de los poetas, como Nezahualcóyotl de Texcoco, cantaba a la fugacidad de la vida, un susurro de una cultura que equilibraba la guerra con el arte. En 2024, un códice hallado en Chalco narró la fundación de Tenochtitlán, un eco de su orgullo grabado en papel de amate. La Caída y el Eco El siglo XVI trajo el estruendo de 1519, y el aroma del hierro y la pólvora llenó el aire cuando Hernán Cortés llegó con sus barcos. El crujir de las velas al desplegarse resonó mientras Moctezuma Xocoyotzin lo recibió, confundido por profecías de Quetzalcóatl. El silbido de las traiciones marcó la Noche Triste en 1520, y el tintineo de las armas al chocar resonó en la caída de Tenochtitlán en 1521, bajo Cuauhtémoc. El eco de las ruinas al derrumbarse sepultó un imperio, pero no su espíritu. Los españoles impusieron su cruz, el crujir de las iglesias alzándose sobre los templos, pero las raíces mexicas sobrevivieron en la sangre mestiza y las tradiciones. El silbido de las lenguas náhuatl aún resuena en pueblos como Milpa Alta, un susurro de su resistencia. A 9 de abril de 2025, los mexicas son un torbellino vivo: en el Zócalo que cubre su capital, en los códices que narran su grandeza, y en el alma de un México que lleva su legado. No fue solo un imperio; fue un rugido de poder y fe, un eco que invita a mirar más allá del lago, al corazón de una civilización eterna.
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  • The Anunnaki (2025)

    Nueva película propuesta para ver.

    Prepárate para una aventura alucinante en El Regreso de los Anunnaki, una emocionante epopeya de ciencia ficción que explora los antiguos orígenes de la humanidad y su futuro potencial. Los Anunnaki, una antigua raza alienígena que antaño moldeó la civilización, han regresado a la Tierra, esta vez con un plan que podría cambiar el curso de la historia. Mientras el mundo se hunde en el caos bajo la amenaza de su avanzada tecnología, un grupo de héroes improbables debe alzarse para enfrentarse a los invasores alienígenas y descubrir los secretos de su misterioso pasado.

    Esta aventura de alto riesgo se adentra en la mitología antigua, combinando acción, suspense y efectos visuales alucinantes mientras los protagonistas luchan contra fuerzas extraterrestres. La película ofrece explosivas batallas espaciales, intensos combates terrestres y una trama cautivadora que explora la intersección de la influencia alienígena y el destino humano.

    A medida que crece la presencia de los Anunnaki, la línea entre el mito y la realidad comienza a difuminarse, y la humanidad debe lidiar con la posibilidad de que todo lo que sabe sobre sus orígenes sea una mentira.

    Con impresionantes efectos especiales, paisajes de otro mundo y un elenco de talentosos actores, El Regreso de los Anunnaki promete ser un festín visual que dejará al público preguntándose qué es posible en el universo. Es una carrera contrarreloj en la que la humanidad lucha por recuperar su futuro y descubrir la verdad tras sus antiguos creadores.

    Calificación: ☆ (4/5) – Un viaje visualmente impactante y lleno de acción que cautivará tanto a los fanáticos de la ciencia ficción como a los amantes de las emociones fuertes.

    ¡Su alcance épico y su intrigante trama la convierten en una película imprescindible!

    #PelículasDeAmor #PelículasDeTendencia #ElRegresoDeLosAnunnaki #AventuraDeCienciaFísica #InvasiónAlienígena #ViajeÉpico #Alucinante
    🎬 The Anunnaki (2025) 👉Nueva película propuesta para ver. Prepárate para una aventura alucinante en El Regreso de los Anunnaki, una emocionante epopeya de ciencia ficción que explora los antiguos orígenes de la humanidad y su futuro potencial. Los Anunnaki, una antigua raza alienígena que antaño moldeó la civilización, han regresado a la Tierra, esta vez con un plan que podría cambiar el curso de la historia. Mientras el mundo se hunde en el caos bajo la amenaza de su avanzada tecnología, un grupo de héroes improbables debe alzarse para enfrentarse a los invasores alienígenas y descubrir los secretos de su misterioso pasado. Esta aventura de alto riesgo se adentra en la mitología antigua, combinando acción, suspense y efectos visuales alucinantes mientras los protagonistas luchan contra fuerzas extraterrestres. La película ofrece explosivas batallas espaciales, intensos combates terrestres y una trama cautivadora que explora la intersección de la influencia alienígena y el destino humano. A medida que crece la presencia de los Anunnaki, la línea entre el mito y la realidad comienza a difuminarse, y la humanidad debe lidiar con la posibilidad de que todo lo que sabe sobre sus orígenes sea una mentira. Con impresionantes efectos especiales, paisajes de otro mundo y un elenco de talentosos actores, El Regreso de los Anunnaki promete ser un festín visual que dejará al público preguntándose qué es posible en el universo. Es una carrera contrarreloj en la que la humanidad lucha por recuperar su futuro y descubrir la verdad tras sus antiguos creadores. Calificación: ⭐⭐⭐⭐☆ (4/5) – Un viaje visualmente impactante y lleno de acción que cautivará tanto a los fanáticos de la ciencia ficción como a los amantes de las emociones fuertes. ¡Su alcance épico y su intrigante trama la convierten en una película imprescindible! #PelículasDeAmor #PelículasDeTendencia #ElRegresoDeLosAnunnaki #AventuraDeCienciaFísica #InvasiónAlienígena #ViajeÉpico #Alucinante
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  • Un equipo de investigadores del Instituto Avanzado de Ciencia y Tecnología de Corea (KAIST) desarrolló una innovadora tecnología capaz de revertir células de cáncer de colon a un estado similar al de células normales, sin necesidad de destruirlas.

    El avance se basa en la creación de un gemelo digital de la red genética que regula la diferenciación celular. Esta simulación permitió identificar interruptores moleculares clave que, al activarse, desencadenan la reversión de las células malignas.

    La tecnología fue validada en estudios de laboratorio y en modelos animales, donde las células de cáncer de colon tratadas recuperaron propiedades propias de células normales. A diferencia de los tratamientos tradicionales, que buscan eliminar las células cancerosas con quimioterapia o radiación, este enfoque propone reprogramarlas, lo que podría reducir la resistencia a los tratamientos y minimizar los efectos secundarios.

    Los investigadores esperan ampliar esta estrategia a otros tipos de cáncer y avanzar hacia su aplicación clínica en colaboración con la industria biotecnológica.
    Un equipo de investigadores del Instituto Avanzado de Ciencia y Tecnología de Corea (KAIST) desarrolló una innovadora tecnología capaz de revertir células de cáncer de colon a un estado similar al de células normales, sin necesidad de destruirlas. El avance se basa en la creación de un gemelo digital de la red genética que regula la diferenciación celular. Esta simulación permitió identificar interruptores moleculares clave que, al activarse, desencadenan la reversión de las células malignas. La tecnología fue validada en estudios de laboratorio y en modelos animales, donde las células de cáncer de colon tratadas recuperaron propiedades propias de células normales. A diferencia de los tratamientos tradicionales, que buscan eliminar las células cancerosas con quimioterapia o radiación, este enfoque propone reprogramarlas, lo que podría reducir la resistencia a los tratamientos y minimizar los efectos secundarios. Los investigadores esperan ampliar esta estrategia a otros tipos de cáncer y avanzar hacia su aplicación clínica en colaboración con la industria biotecnológica.
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  • Qué bonita es la vida en Manzanillo
    Qué bonita es la vida en Manzanillo 🤩🌊🏖️🐠
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