Las sepias son asombrosamente inteligentes.
En un estudio realizado en el año 2021 por la Universidad de Cambridge y publicado en Proceedings of the Royal Society B, las sepias comunes (Sepia officinalis) superaron una versión adaptada del "marshmallow test", una prueba diseñada para evaluar el autocontrol en niños humanos.
Seis sepias aprendieron a esperar hasta 130 segundos por una recompensa más deseada (camarón vivo) en lugar de elegir un alimento menos preferido (camarón rey).
También, mostraron habilidades de aprendizaje asociativo al adaptarse a señales visuales para obtener recompensas. Este descubrimiento resalta la capacidad de planificación y flexibilidad cognitiva de los cefalópodos, comparables a vertebrados como chimpancés, cuervos y loros.
Los investigadores sugieren que esta habilidad podría estar vinculada a sus estrategias de caza, esperando pacientemente presas de mayor calidad mientras se camuflan
Las sepias son asombrosamente inteligentes.
En un estudio realizado en el año 2021 por la Universidad de Cambridge y publicado en Proceedings of the Royal Society B, las sepias comunes (Sepia officinalis) superaron una versión adaptada del "marshmallow test", una prueba diseñada para evaluar el autocontrol en niños humanos.
Seis sepias aprendieron a esperar hasta 130 segundos por una recompensa más deseada (camarón vivo) en lugar de elegir un alimento menos preferido (camarón rey).
También, mostraron habilidades de aprendizaje asociativo al adaptarse a señales visuales para obtener recompensas. Este descubrimiento resalta la capacidad de planificación y flexibilidad cognitiva de los cefalópodos, comparables a vertebrados como chimpancés, cuervos y loros.
Los investigadores sugieren que esta habilidad podría estar vinculada a sus estrategias de caza, esperando pacientemente presas de mayor calidad mientras se camuflan